Transformación digital cómo empezar

Transformación digital: cómo empezar para una digitalización exitosa

Muchas de las empresas con las que convivimos hoy en día se crearon antes de la digitalización, pero lo cierto es que aquellas que no den el paso de transformarse digitalmente, adaptándose a los nuevos hábitos de la sociedad, tendrán más dificultades para sobrevivir en un mundo global.

Es cierto que a veces el proceso puede parecer abrumador, complicado y lleno de sacrificios, pero lo cierto es que hay estrategias simples y concretas que pueden ayudar a que la transformación digital de la empresa sea un proceso exitoso. No tiene que hacerse todo a la vez, ni hay que invertir cantidades monstruosas de dinero que pongan en riesgo el futuro de la empresa. En muchos casos es más un problema de cultura y organización que de tecnología. Existen empresas de servicios tecnológicos que pueden asesorar en el proceso de transformación digital, y existen tecnologías que se adaptan perfectamente a cualquier tipo de sector y empresa.

Es un ciclo constante basado en crear valor, monetizarlo y volver a empezar. La tercera fase debe ser, en función de la estrategia que decida la empresa, optimizar procesos, generar nuevas fuentes de ingresos, lanzar nuevos productos, llegar a más mercados, consolidar la posición de liderazgo con nuevas ventajas competitivas gracias a la transformación digital, etc. En esencia tener presente que hay que evolucionar y reinventarse continuamente para no quedarse atrás.

Aunque el concepto de «crear valor» como tal no cambia, la forma de crearlo es totalmente diferente hoy a como era hace 30 años, y sobre todo a como será dentro de 30 años. No se compra hoy igual que se compraba hace 30 años, ni se consume entretenimiento igual que se consumía hace 30 años.

Es muy probable que la transformación digital sea la respuesta a algunas de las preguntas que tienen lugar en el seno de muchas empresas:

  • ¿Cómo podemos diferenciarnos de la competencia?
  • ¿Cómo podemos aumentar el margen de beneficios o conseguir nuevas fuentes de ingresos?
  • ¿Cómo podemos llegar a nuevos mercados?
  • ¿Cómo podemos llegar a nuevas generaciones de clientes?

Sea cual sea la situación actual muy probablemente siga existiendo margen de mejora y mucho trabajo por hacer. Y seguramente sea ahora el mejor momento para empezar.

6 consejos para empezar un proceso de transformación digital con éxito

Analizar qué significa digitalización para tu empresa

Aunque embarcarse en un proceso de transformación digital es importante, lo primero es analizar y entender qué significa realmente un proceso de este tipo en tu sector, en tu empresa y en tus circunstancias. En función de la madurez y background de la empresa, del sector, de la competencia, del ecosistema, de la situación actual y de los planes de futuro, el proceso de transformación digital será diferente para cada empresa.

Hacer una auditoría que permita diagnosticar con claridad cuáles son los retos más importantes en función de los objetivos establecidos, de forma que pueda trazarse un plan y establecer prioridades, es fundamental para empezar con buen pie.

Encontrar a un socio adecuado

Como hemos comentado anteriormente es cierto que a veces el proceso puede parecer un poco abrumador y un obstáculo importante. La ventaja es que hay empresas que se dedican a esto, especialistas en las diferentes áreas que pueden intervenir y asesorar en el proceso de transformación digital.

Quizás sea más sensato centrar los esfuerzos en el propio negocio y dejar asesorarse por un especialista. Sin caer en la tentación de delegar y despreocuparse por completo del proceso porque no hay que olvidar quién es el experto en transformación digital y quién es el experto en el negocio. Y las dos partes son importantes. Esforzarse por establecer procesos de comunicación fluida y fomentar un ambiente de trabajo agradable es importante para tener éxito.

Un buen socio tecnológico puede aportar conocimientos específicos, servicios de consultoría, nuevas ideas y perspectivas, consejos, soluciones y casos de éxito que haya podido implementar satisfactoriamente en otras empresas.

Establecer un plan de acción para tu empresa

Con los desafíos clave y retos claramente establecidos, se está en mucho mejor posición para comparar y evaluar las diferentes alternativas de transformación digital que existen para la empresa. Estas opciones podrían ser desde la transformación del front-end, procesos y gestión de la relación con los clientes, como transformación de los productos o servicios en sí, o la transformación del back-end y procesos internos que incluyan nuevas tecnologías para mejorar la eficiencia.

Algunas opciones o ejemplos podrían ser:

  • Diseño de nuevos productos con un componente digital (IoT), que proporcionen nuevas experiencias o soluciones a los usuarios.
  • Construcción de nuevos ecosistemas digitales que den soporte al proceso de transformación digital. Tecnologías cloud, conectividad, big data, etc.
  • Nuevas posibilidades de monetización de la información. Las nuevas tecnologías permiten medir y recopilar datos de los usuarios que permiten, tras analizarlos de forma correcta, monetizar la información recopilada.
  • Transformación de procesos. Automatización de procesos, máquinas de control numérico (impresoras, fresadoras, grabadoras láser, etc), machine learning, son tecnologías al alcance de cualquier empresa, que unidas a la experiencia del personal adecuado con conocimiento del sector económico pueden crear importantes sinergias y aportar claras ventajas competitivas.

Comunicar para conseguir el compromiso del equipo

Una vez que las estrategias y el plan de acción está definido es importante comunicar y conseguir el apoyo de todo el equipo. Pequeñas, medianas y grandes empresas. Con el compromiso de cada uno de los miembros del equipo es mucho más fácil que el proceso salga bien, ya que como todo proceso, requiere de feedback para seguir puliendo detalles que permitan una mejor implementación. Comunicar de forma eficiente para hacer entender al equipo dónde se quiere llegar y fomentar el feedback y las críticas constructivas en un factor que puede marcar la diferencia.

Invertir en formación, invertir en personal

Es importante automatizar procesos e implantar el uso de nuevas máquinas y tecnologías en la empresa, pero no hay que perder de vista que necesitamos a las personas. No existe ninguna máquina, ni sistema, ni proceso que pueda aportar tanto valor como un empleado bien formado y con un compromiso honesto con la empresa.

Invertir en personal y facilitar procesos de formación, promoción, crecimiento y desarrollo es tan importante como invertir en tecnología. La tecnología tiene sentido cuando esta se pone al servicio de las personas Sin valores no hay progreso.

Actuar

Recopilar información, analizar, pensar, no es que esté bien, es que es necesario… pero para avanzar hay que actuar. Marcar unos objetivos a corto plazo, empezar a actuar (con sentido) e ir reajustando el plan.